miércoles, 9 de marzo de 2011

TODOS CON ÀNGEL SALA Y EL FESTIVAL DE SITGES


No se me ocurre mejor imagen que la aplicación del método Ludovico en La naranja mecánica para expresar lo que está ocurriendo en estos momentos en nuestro país. Y es que, para mi asombro, se está dando ante nuestros mismos ojos un caso de censura feroz en toda regla. Porque si la censura me resulta ya de por sí un método cuanto menos cuestionable (y, en el peor de los casos, deleznable), ¿qué decir cuando simplemente se aplica a ciegas, sin reflexión ni fundamento ninguno? Pues esto es lo que está sufriendo Àngel Sala, el director del festival de Sitges, que acaba de ser imputado por el titular del juzgado de instrucción nº 8 de Vilanova i la Geltru (Barcelona) nada menos que por haber permitido la exhibición de una película que contiene pornografía infantil. Supongo que todos estáis flipando en colores con lo que leéis. ¿Y qué pelicula es esa? Pues sí, amigos, A Serbian Film.

Ya hace unos meses expresé en este mismo blog mi opinión sobre el polémico film. Una cinta sin duda incómoda, atrevida, con algunas escenas francamente desagradables e incluso dolorosas de ver. Una cinta sobre la que ya dije que, de tan extrema, no tenía muy claro lo honesto de sus objetivos, a pesar de que el director los había expresado contundentemente en ruedas de prensa y entrevistas. Una cinta tal vez cuestionable para unos, tal vez monstruosa para otros, y tal vez brillante para otros. Donde no creo que quepa discusión alguna es en el hecho de que se trata de una cinta que cuenta algo y que invita al debate... no sólo al de los horrores que muestra (y que, desde luego, no se ha inventado su director), sino al de la creación y el consumo de ficción en sí mismas. Porque, sí, de eso estamos hablando: de ficción. A Serbian Film NO es un film pornográfico porque, os lo aseguro con rotundidad, no hay pornografía en él. Ni siquiera es un film erótico, porque su tono es tan lúgubre y sórdido que tampoco vemos el menor atisbo de erotismo en él (y si realmente existe algún espectador que encuentra excitante alguna de sus escenas, por favor, que se lo haga mirar...). Por lo tanto, sobra concluir que A Serbian Film tampoco contiene pornografía infantil... ni erotismo infantil, faltaría más. De ahí mi absoluta sorpresa ante cómo este asunto ha podido siquiera llegar a los juzgados, y más cuando el film ha sido exhibido en festivales de todo el mundo sin que ocurriera nada remotamente similar. Desde luego, algo asombroso en este país de dobles raseros, donde todo el mundo ha bailado al ritmo de Melody (una niña vestida como no te diré yo el qué y haciendo poses no precisamente de niña) y, sin embargo, se escandaliza ante una película que, independientemente de que cuestionemos o no su calidad, pone el dedo en la llaga de una serie de problemas monstruosos a los que la mayoría de veces ni siquiera dedicamos un pensamiento fugaz.

Por mi parte, pues, y como creador que soy al fin y al cabo, sólo quisiera unir mi voz a la de tantas otras voces que se han levantado en defensa de Sala ante un acto que consideramos de todo punto injusto e injustificado... y más cuando él sólo es un programador de contenidos, ni siquiera responsable de la obra final. Pero incluso aunque suya hubiera sido la película, me seguiría pareciendo una medida irracional, dado que NO nos enfrentamos a una obra que muestre pornografía infantil, ni tampoco a una que haga apología de la misma (de hecho, más bien todo lo contrario). Es una pena que la ceguera de algunos lastre la libertad de todos.


Y ya para finalizar, aprovecho la ocasión para invitaros a los que os podáis pasar este sábado por la librería madrileña Estudio en Escarlata (C/Guzmán el Bueno, 46) a las 19:30 a la presentación de Cuerpos descosidos, mi primera novela de terror. Será una presentación muy especial, os lo aseguro. ¡Allí nos vemos!

9 comentarios:

  1. Melody... y la Maria Isabel, que es una tela marinera, niñas de verdad vendiendo caras de guarra con tres capas de maquillaje y nada de cachos de plástico como en la película. Las Miss Sunshine patrias...

    Yo también estoy alucinando de toda la que se ha montado, pais lamentable de periodistuchos sensacionalistas y asociaciones cristianas -_-U, el Salas ha hecho mas por la cultura del pais que todos juntos, aparte que se le vé un tio muy majo y muy cercano.

    En fin, me pilla ligeramente lejos lo de la presentación, ains.

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  2. Completamente de acuerdo contigo, a mí me resulta surrealista lo que está pasando y que Salas se esté enfrentando a una denuncia de esta envergadura por hacer su trabajo... ¿los espectadores que la vieron en Sitges también deberían ser denunciados entonces? Ains, qué país.

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  3. ¡Muy fuerte me parece a mí también! O más que fuerte, increíble. Me gustaría saber más sobre el punto de vista del/de los denunciantes y sus argumentos para proceder a la denuncia, porque... esto parece la inquisición!

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  4. DARIO: Ya te digo, este es el país al revés. Cuando no van vendando las tetas a las adolescentes, ponen tangas a las niñas. Pa cagar-se i no torcar-se. Y estoy contigo: lo que está haciendo Àngel Sala por la cultura de este país, qué pocos pueden adjudicarse.

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  5. No puedo añadir mucho más a lo que has dicho tú y a lo que también expresan tus comentaristas. Parece increíble que mucha gente confunda todavía realidad y ficción. No estamos para salir corriendo cuando llega un tren como cuando se inventó el cine. Por aquella época también algunos pensaban que se moría de verdad y luego se asombraban de que un actor volviera a aparecer en otra película (no me lo invento, hay testimonios de esa índole en diversos libros).

    Además, la mayoría de filmes presentan situaciones incómodas percisamente para crear rechazo y que pensemos sobre esa cuestión. Diría que más del 80% de filmes (me quedo corto, seguro) buscan denunciar lo que presentan. ¿O acaso con El Padrino se busca que todos nos hagamos mafiosos? ¿o con todas las de terror que matemos? ¿o con todas las de ladrones que robemos? ¡Por favorrrrrrrrrrrrrr!

    De tan susceptibles nos estamos pasando al otro lado y nos volveremos todos gilip... Así llegará un momento que no podremos ni abrir la boca.

    Aunque de otra manera, tú acabas de pasar por algo parecido y tu blog de las Ultracerdas te lo han blindado para mayores.

    En fin, saludos.

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  6. Por cierto, no sé si te lo dije pero cuando ví la película me quedé tan pancho, no me impresionó demasiado. He visto ya tantas películas de terror en mi vida y tantas cabezas rodando que es difícil que alguna me revuelva el estómago. Me lo revuelve más el "Sálvame" y esos tantos programas del corazón, que eso si que es pornografía de la dura y atonta más a la gente.

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  7. Yo también quiero solidarizarme con Sala, el Festival de Sitges no merece esta mala promoción.
    Te deseo lo mejor en tu presentación (ahora voy a leer "La tregua") lástima que me ha pillado la semana después de mi breve paso por Madrid. Saludos. Borgo.

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  8. STIGMA: Habrá presentación en Castellón y Onda! :-D

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